Una vez más me volví a ilusionar, una vez más volví a caer en tu juego. Otra vez estoy sufriendo mientras vos estas con otra porque te aburriste de mi, devuelta. Yo estoy deprimida, acostada mirando capítulos y capítulos de series de amor adolescente en las que pasan cosas que nunca me van a pasar a mi. ¿Y vos? ¿Y vos qué? Estas yendo al cine con tus amigos y la otra, esa que es como yo, esa a la que boludeas tanto como a mi. Me encantaría decir que esta fue la última vez, que no me vas a volver a boludear, pero sería como la décima vez que lo digo y me fallo a mi misma. Sabes por que? PORQUE ME PODES. Porque no tengo la fuerza de voluntad suficiente como para decirte que no, ni para cortarte el rostro. Y eso es lo que me da bronca, que yo me consideraba una persona fuerte, hasta que llegaste vos y me hiciste darme cuenta de que era la mentira más grande que me podía decir a mi misma. Uso toda la fuerza que me queda para borrar tu número de teléfono, aunque se que si mañana me hablas, no voy a poder tardar ni diez minutos en contestarte. Siempre es la misma rutina, me hablas, me ilusiono, me empezas a colgar, me hablas cada vez menos hasta que no me hablas más, me deprimo mientras a vos te chupa un huevo y la mitad del otro, te borro de todos lados, y cuando te empiezo a superar, ahí es cuando te das cuenta de que la otra te aburrió y que es mi turno del boludeo, y ahí se vuelve a repetir todo. Es un ciclo sin fin, y para mi un sufrimiento interminable. Espero algún día poder decir basta y cagarte a putiadas, ese día voy a estar orgullosa de mi misma. Ojalá en algún momento de tu vida, alguien te haga sufrir de la misma manera que vos a mi. Mientras tanto, hasta la próxima.